Se están desarrollando nuevas herramientas tecnológicas que permiten evaluar a los pacientes con trastornos vestibulares en un contexto más dinámico y brindar datos que enriquecerán el conocimiento y manejo de la enfermedad.
Los trastornos vestibulares pueden presentarse con diferentes cuadros clínicos en la población: desde crisis agudas de vértigo hasta cuadros más crónicos, y muchas veces van asociados con otros problemas como depresión, deterioro cognitivo y mayor riesgo de caídas con consecuencias socioeconómicas.
Limitaciones en la evaluación de los desórdenes vestibulares
Existen diferentes cuestionarios para evaluar los síntomas y las consecuencias de los trastornos vestibulares, como el Dizziness Handicap Inventory y otros, pero existen inconvenientes con el uso de herramientas transversales.
El primer punto es que son retrospectivos y esto le agrega sesgo de recuerdo pudiendo algunas mediciones estar sobrestimadas o subestimadas, y otra dificultad es que se basan en una observación puntual y no documentan la variabilidad en la sintomatología o los patrones de riesgo en el contexto de la vida diaria.
Estas mediciones transversales no pueden captar los síntomas fluctuantes por ser componentes dinámicos ni la influencia del contexto, por lo tanto son subóptimos para estudiar la frecuencia exacta de las crisis, sus posibles desencadenantes y la calidad de vida en los trastornos vestibulares.
Aplicaciones telefónicas: las nuevas herramientas para monitorizar los desórdenes vestibulares
Recientemente, las aplicaciones en un teléfono inteligente mejoraron la logística de recopilación de datos en los métodos de muestreo de experiencias, que brindan información sobre el estado actual y el funcionamiento de un individuo, así como las circunstancias y la existencia e influencia de factores ambientales, sociales y psicológicos, documentándose mediante un autoinforme en tiempo real que permite obtener información sobre la variabilidad de las crisis a lo largo del tiempo.
La monitorización estandarizada de los pacientes mediante estas nuevas herramientas mejora el trabajo clínico y la investigación, complementando a los cuestionarios existentes.
La red Dizzynet desarrolló una aplicación para los trastornos vestibulares: el DizzyQuest.
DizzyQuest
DizzyQuest es un diario electrónico basado en una aplicación y disponible como descarga para teléfonos inteligentes que se ejecutan en iOS y Android. El DizzyQuest consta de cuatro cuestionarios. El “cuestionario intradía” evalúa la situación actual a intervalos semialeatorios a lo largo del día y los otros tres cuestionarios son retrospectivos, reflejando en principio una situación agregada de la noche o del día anterior. El cuestionario de ataques se basa en eventos y se completa después de la ocurrencia de un ataque de vértigo o mareos. Cada cuestionario tiene su propio conjunto específico de preguntas, aunque existe una superposición considerable entre algunas de ellas.
Los cuatro cuestionarios combinados no solo miden los síntomas vestibulares, sino también la emoción, la cognición, el contexto y los eventos estresantes. Todas las preguntas sobre síntomas utilizan la escala Likert de siete puntos, que van desde 1 (nada) a 7 (mucho).
La evaluación de la primera versión de DizzyQuest, mostró que la tasa de abandono fue del 19% de los pacientes. Afortunadamente, ningún paciente abandonó debido a alguna carga psicológica experimentada relacionada con el uso de DizzyQuest. La mayoría de las razones informadas para la deserción involucraron problemas técnicos y circunstancias personales.
Datos arrojados por DizzyQuest
El tinnitus fue el síntoma más informado, probablemente reflejando la sobrerrepresentación de pacientes con enfermedad de Ménière en esta población de estudio. Sin embargo, se ha demostrado que DizzyQuest capturó diferentes perfiles de sintomatología entre subgrupos de trastornos vestibulares. Por ejemplo, el desequilibrio y los problemas visuales durante el movimiento se notificaron significativamente más en pacientes con vestibulopatía bilateral.
Además, los pacientes con vestibulopatía bilateral informaron en promedio la menor cantidad de crisis de vértigo. Teniendo en cuenta estos resultados, se puede concluir que el DizzyQuest es capaz de medir diferentes perfiles de sintomatología entre pacientes con diferentes trastornos vestibulares.
Se demostró que el bienestar psicosocial puede verse afectado negativamente por síntomas neuro-otológicos como desequilibrio, tinnitus y oscilopsia. Esto es congruente con la literatura previa en la que se demostró que los pacientes con vértigo o mareos son más propensos a tener comorbilidad psiquiátrica.
Ventajas de DizzyQuest frente a otros cuestionarios
El análisis del DizzyQuest concluyó que es capaz de capturar los síntomas vestibulares dentro de su contexto psicosocial en la vida diaria, con poco sesgo de recuerdo. Alcanzó las tasas de respuesta deseadas y mostró diferentes perfiles de enfermedad entre subgrupos de pacientes con diferentes trastornos vestibulares. DizzyQuest podría utilizarse como una herramienta complementaria para investigar los síntomas y la calidad de vida en pacientes con trastornos vestibulares.
Pasos futuros para DizzyQuest:
- Reformulación de algunos elementos del cuestionario
- Validarse frente a los cuestionarios que ya venían utilizándose
- Traducirse a varios idiomas.
Además, las recientes innovaciones tecnológicas como pruebas auditivas portátiles, gafas de videooculografía para uso doméstico y sensores de movimiento portátiles en combinación con el DizzyQuest durante la vida diaria, podría resultar en conocimientos clínicamente útiles con respecto a la correlación entre los síntomas subjetivos y las mediciones objetivas en pacientes con trastornos vestibulares.
Bibliografía
E. C. Martin et al. Introducing the DizzyQuest: an app‑based diary for vestibular disorders. Journal of Neurology (2020) 267 (Suppl 1):S3–S14.